Dos surcos se han clavado en el rostro
Qué el maquillaje borroso dibuja en plenitud de tristeza.
Lo esperó en el balcón blanquito
Bajo la luna espesa,
Fueron horas eternas en que la ilusión
Desvaneció de a poco...
Habría querido abrazarle, habría soñado besarle!
Qué le pasó al amor que tanto añoraba?
Ya, al retirarse nada importaba,
Un adiós era lo menos para aquella noche,
Un alma sollozaba...
La soledad circundó la habitación,
La rodeó completa, le regresó la calma.
linayparra
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